domingo, enero 24, 2010

Lluvia

¿A dónde se fue el optimismo lluvia?
¿a dónde se fue?
¿y a dónde te fuiste tú?
Que el cielo está rojo de rabia
y aún así no bajas hasta acá
pero quién soy para quejarse,
si estoy rojo de rabia y tampoco puedo llorar
¿A dónde se fue el optimismo?
Entonces  me siento a esperar y esperarte .

Lluvia mansa llega por favor,
eres la bendición de la tierra que mojas
y de la cara del muchacho que nació tarde para mí
y el canto que llena mi vacío salón .
Que la tierra está vacía
y mi furia encuentra calma en tus gotas
que miran al cielo mientras vienen cayendo.
Y cuando traigas tus besos de agua lluvia bonita
yo no podré compartirlos con él
solamente a ojos cerrados pensaré
que le beso con la boca mojada.

A dónde se fue el optimismo lluvia
A dónde me fui yo que aquí no estoy
Se anida en mí el lamento de haber nacido tan temprano
qué peligrosa es la costumbre
porque  yo me acostumbre a mi tristeza y a mi piel intacta.

Lluvia de gris suave
llena mis montañas de verde
esas donde yo viví, esas que ya no veo.
Y quisiera llorar gotas de lluvia,
pero aquella agua es salada.
Quisiera que me cantaras otra vez para dormir
y en tu silente cancioncita quedarme dormido.

Quiero sentir que estoy con él,
aunque la lluvia deja a veces 
mil labios en los vidrios de mi ventana.
¿Por qué no vienes lluvia?
Que mi cuerpo te necesita.
Tú que eres lagrimas de poetas
sueltas ángeles de agua que caen sin querer dañar,
porque tú, lluvia bonita eres la de verdad,
la que moja y bendice en el misterio
de almas de nubes sin malas intenciones.
Y esta noche me pregunto en la quietud de mi soledad...
¿cuándo vendrás lluvia, cuando vendrás?
A disimular mi sequía.
Que a él no creo que pueda verlo ya más.

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