Cambié la violencia de los golpes en la cabeza
por arrojarme al vacío esperando ser salvado.
Cambian los tiempos
cambian las violencias.
El problema es que no cambié yo.
Yo me sigo arrojando
aunque ya no haya espacio para los salvados.
Camino a la casa que no tengo
camino quebrado de tobillos
camino con todos los daños
con mi vergüenza impar.
Sabía que algún día dolerías.
Sabía que algún día.
Adiós, mirada de mil soles
Adiós, beso sorpresa en el bosque
Adiós, sexo sorprendente.
Adiós ¿Quieres ser mi novio?
El destino es ausencia de responsabilidad.
Me encanta esa expresión "con mi vergüenza impar". No te comprometas con el adiós, que tú eres una eterna bienvenida.
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