hizo silencio,
su voz fue ahogada en un mar de basura.
La madre se vistió de negro y lloró,
gritos de tijeras salían de su garganta.
Otro muerto, uno más, otro más.
Pero nadie vio, nadie sabe, nadie supo nunca.
Nubes crueles tosen humo
un animal malo enseña a un niño a dañar al mar.
Los maestros renuncian porque les han robado la voz
los maestros se van porque los alumnos eligen ser sordos.
Entonces.
Otro muerto
uno más
otro más.
Pero nadie vio
nadie sabe,
nadie supo nunca.
La luna amarilla se hizo mujer
y en las calles de este mundo negro
enloqueció en la locura de otro.
Y nunca nadie estando vivo trajo tanta muerte.
Pero el mundo está bien
son las personas las que están mal.
Pero nadie vio
nadie sabe,
nadie supo nunca.
Levanto mi voz
tejo poemas,
y me niego a matar
me niego ensuciar
me niego a cortar.
Pero el mundo no me reconoce;
soy un agente ajeno al cuerpo de esta realidad
entonces
sus glóbulos blancos buscan eliminarme,
corregirme
sacarme.
Glóbulos negros tal vez.
El país fue pintado con el color de la sangre
nadie nunca dijo nada.
Maldito sea el hombre que atenta contra el hombre
maldito sea siempre.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario